De mayor a menor fue el partido de Tomás Etcheverry en los cuartos de final del ATP 250 de Estocolmo. El argentino, que regresaba al circuito tras una lesión abdominal, cayó por 6-7 (4), 6-3 y 6-4 ante el danés Holger Rune, número 11 del mundo y principal favorito del certamen.
El platense había comenzado con autoridad, sólido desde el fondo y efectivo con el primer servicio. Logró quedarse con un ajustado primer set en el tie-break, mostrando su mejor versión desde el regreso a la competencia. Sin embargo, el desarrollo cambió en el segundo parcial: Rune encontró ritmo, subió la intensidad y empezó a dominar los intercambios largos, quebrando temprano para igualar el marcador.
En el tercer set, el danés hizo valer su jerarquía. Un quiebre en el tercer game marcó la diferencia definitiva. Pese a una molestia en el muslo derecho que lo obligó a pedir asistencia médica, Rune mantuvo la solidez en su servicio y cerró el triunfo después de más de dos horas de juego.
El campeón de 2022 alcanzó así su tercera semifinal de la temporada y se medirá con el francés Ugo Humbert, vencedor de Lorenzo Sonego por 6-7 (3), 6-0 y 6-3. Con este resultado, Rune continúa su carrera por ingresar al Masters de Turín, donde actualmente figura 11° en la “Race”.
Para Etcheverry, la eliminación no opaca una buena semana: sumó puntos valiosos y volvió a mostrar competitividad tras el parate. Además, se convirtió en el sexto argentino en alcanzar los cuartos de final en Estocolmo, siguiendo los pasos de Guillermo Vilas, Guillermo Cañas, Juan Mónaco, David Nalbandian y Juan Martín del Potro.